La transformación digital impulsa el aumento del uso de software empresarial.
El software no solo está consumiendo el mundo, sino habilitándolo. Según un estudio de Gartner, se espera un aumento del 11,5 % en el uso de herramientas de software empresarial. Las arquitecturas empresariales están orientándose cada vez más hacia modelos controlados por software, lo que permite a las empresas responder y hacer frente a la evolución de la situación geopolítica, las perturbaciones influenciadas por el clima y las tendencias del mercado en constante cambio, garantizando al mismo tiempo la seguridad y la sostenibilidad.
Para hacer frente a estos escenarios, las empresas necesitan ser resistentes y ágiles, con mayor supervisión y conocimiento para poder modelar, planificar y pivotar. Esto significa disponer de sistemas de software que vinculen todos los aspectos de la operación, haciéndolos visibles, medibles y gestionables.
“A pesar del ritmo del cambio tecnológico, los sistemas y controles de software, basados en los avances de la IIoT, la IA y el ML, y la computación en la nube y en los bordes, están permitiendo a las empresas tener una mayor visibilidad, conocimiento y supervisión de las operaciones. Esto está proporcionando un nivel de resistencia que antes no era posible para hacer frente a la vorágine de influencias en el mundo actual. Al permitir una mayor gestión del riesgo cibernético, así como proporcionar una base para los compromisos y objetivos de sostenibilidad, el software ha pasado de comerse el mundo a permitirlo”, explica Natalya Makarochkina, Vicepresidente Senior de la división de operaciones internacional de Secure Power, en Schneider Electric.
Están surgiendo nuevas arquitecturas empresariales que incluyen una combinación de un 20 % de centros de datos centrales, un 30 % de nube pública y un 50 % de despliegues periféricos en los próximos tres años. Esto traerá consigo nuevos niveles de sensores, supervisión, visibilidad, gestión y análisis.
La base de este enfoque no será solo la visibilidad de los datos, sino la orquestación de la infraestructura de datos, con las capacidades emergentes de DCIM 3.0. Ejemplos de cómo se está desarrollando esto incluyen la industria alimentaria, donde los productores de huerta están reduciendo la temperatura de sus invernaderos, y la asistencia sanitaria, donde las aportaciones de los médicos a pie de cama pueden analizarse en despliegues periféricos para realizar análisis en tiempo real. Para conectar todos los puntos de conexión entre el usuario y las aplicaciones, es importante ser conscientes de la seguridad y del riesgo que conlleva. Por eso se han desarrollado asociaciones sólidas para comprender los riesgos y garantizar que las aplicaciones y servicios mantengan la resistencia, la seguridad y la sostenibilidad de los sistemas informáticos del mañana.